lunes, 22 de septiembre de 2008

Estoy aquí

Y respiro, y poso mis manos sobre el teclado, aunque sólo me apetece, única y exclusivamente,que me tumbes en la cama desnuda, que me vendes los ojos, atándome las manos y tapándome la boca para que no pueda emitir ningún sonido, tocándome hasta que me arda la piel, hasta que pida clemencia, hasta que vuelva a salirme de mi cuerpo y me mire desde el techo, encogiendo el estomago y mordiéndome los labios, quiero olvidarme de que mis noches se terminan por inercia y dejar de sentirme tan absurdamente sola en esa cama, demasiado grande para mí. Quien sabe, si hoy por hoy, no dependo de ello tanto como a veces creo, si soy capaz de no sentir absolutamente nada por quien está durmiendo a mi lado y morirme pensando en alguien a quien ha evaporado el tiempo y la distancia de mi vida. Las personas que pasan por aquí, jamás sabrán el porqué ni el cómo de la analítica de la situación, como tampoco entenderán que lucho por sobrevivir antes que por vivir, pasan por el mismo sitio, llevándose una parte y grabando otra en mí, por eso puedo rememorar el olor y distinguir las pisadas a distancia.... 

martes, 16 de septiembre de 2008

Tan efímero como un pensamiento...

Y tan brillante, tan intenso, tanta luz, tanto recorrido, tanto tiempo que ha pasado... No sé si se acabaron las frases de no puedo, no quiero, espero pero no llega, desespero por esto pero, sé que la mayoría de las veces, siempre paso ese sendero oscuro hasta darme cuenta de que tenía los ojos cerrados y por eso no veía nada. Si pierdo, desprecio lo que ya tengo, si gano, la avaricia crece. Cuando no sé cómo mirar a los ojos, distorsionada al reflejo, ¿soy así de real? Y me viene ese pesar, de que me estanco en el suelo con un cordel imaginario atándome los pies, cómo diablos voy a moverme... El narcisismo, es falta de amor propio... (en fin).