lunes, 24 de junio de 2024

La superación tiene sus pasos.
Como la vida, tiene altibajos.
Me he exigido más de lo que podía los últimos meses.
He forzado el cuerpo y la mente.
Ahora estoy flotando en la cama, por una parte en paz, por otra con ganas de gritar.
Lo irreal que es, que me hagan sentir viva y a la vez aterrorizada.
No sé qué hacer.
Cuando me doy al placer surgen problemas.
Pierdo el control.
Me condiciona mi perdición.
No sé qué es bueno y qué es malo.

No hay comentarios: